AFIP

 

La política industrial requiere un enfoque coordinado hacia la mayor parte del espectro de las políticas comerciales sujetas a las disciplinas internacionales que en la actualidad son el objeto de negociaciones comerciales.

Estas incluyen las políticas arancelarias, los subsidios, las políticas para el desarrollo de una eficaz infraestructura de servicios y del sector de servicios para la producción, (por ejemplo, telecomunicaciones, servicios financieros, servicios de transporte, otros servicios para las actividades de producción, políticas respecto al movimiento de personas), políticas de inversión y derechos de la propiedad intelectual.

Así pues, la ejecución de una política industrial coherente necesita una estrategia negociadora coordinada, que cubra todos los aspectos de las negociaciones comerciales. La efectividad de los aranceles como herramienta de industrialización está vinculada al marco de política monetaria bajo el que operan.

Cuando la cuenta de capital es liberalizada, se puede perder el control sobre los tipos de cambio, y obviamente la apreciación de los tipos de cambio puede obstaculizar la competitividad de las exportaciones y el impacto de la protección arancelaria. Además de las medidas comerciales formales, como los aranceles de importación y exportación y las restricciones cuantitativas, hay otras medidas comerciales, que actualmente son objeto de acuerdos y negociaciones comerciales, que también son componentes esenciales de una política industrial y comercial coherente.

Estas incluyen: - Políticas de promoción de la exportación, que proporcionan empleo, mayores ingresos y divisas para financiar la industrialización: Políticas agrarias, que reducen la dependencia de las importaciones de productos alimenticios esenciales y que proporcionan apoyo a los ingresos derivados de la exportación de la agroindustria en los casos en que sea posible, Políticas destinadas a establecer una infraestructura de servicios eficiente, obteniendo servicios avanzados para las actividades de producción y las tecnologías asociadas, y acceso a los canales de distribución, así como acceso a energía de bajo coste; - Políticas de inversión que maximicen la contribución de la IED al desarrollo industrial mediante el acceso a capital y tecnología en sectores clave, Políticas de propiedad intelectual destinadas a facilitar el acceso a la tecnología, Disposiciones para promover la cooperación industrial;.

Colaboraciones del sector público y el privado La política industrial tiene más opciones de funcionar mejor si está basada en una colaboración estratégica entre los sectores público y privado y si la política gubernamental logra recabar información relevante del sector privado –sobre cuáles son las restricciones y externalidades más limitantes a las que se enfrenta este sector— y es capaz de abordarlas de manera eficaz.

Actuando de esta manera se puede estimular más fácilmente el espíritu emprendedor del sector privado, que es un ingrediente crucial en una política industrial exitosa. No obstante, aunque el gobierno debería estar al corriente de las preocupaciones del sector privado, debe evitar que los grupos de interés del sector privado se “apropien” de sus políticas si se quiere que la política industrial beneficie el interés nacional más amplio. Unas instituciones estatales fuertes y una visión de gobierno clara son elementos cruciales para conseguir este objetivo.

Titular

  • Sr. Segura, Abelardo

    Sr. Segura, Abelardo

    Sr. Segura, Abelardo

  • Sr. Nuñez, Pablo Damián

    Sr. Nuñez, Pablo Damián

    Sr. Nuñez, Pablo Damián

Noticias del Departamento